Los municipios con mayor recaudación fortalecen su liquidez gracias a despachos de cobranza especializados

Por Redacción | Sección Dinero y Negocios

En un contexto donde los gobiernos locales enfrentan fuertes presiones presupuestales y una alta dependencia de las transferencias federales, cada peso cuenta. Por ello, modernizar los mecanismos de recaudación y apoyarse en despachos privados especializados en cobranza se ha convertido en una estrategia clave para fortalecer la liquidez y autonomía financiera de los municipios mexicanos.

La recaudación local: un reto pendiente

Según datos del INEGI, durante 2021 los municipios del país obtuvieron más de 471 mil millones de pesos de ingresos, de los cuales solo 28.9% correspondió a ingresos propios, mientras que el 71.1% provino de participaciones y aportaciones federales y estatales.

Este rezago limita la capacidad de los ayuntamientos para invertir en obras públicas, servicios y desarrollo social. Entre las principales causas se encuentran padrones catastrales desactualizados, métodos de cobro obsoletos, falta de personal especializado y, en algunos casos, decisiones políticas que frenan el cobro del impuesto predial en años electorales.

Municipios que decidieron innovar

Aun con estos desafíos, algunos gobiernos locales han logrado resultados notables. Zapopan, Querétaro, Tijuana, Ciudad Juárez, Culiacán y La Paz se ubican entre los municipios con mayor recaudación de impuestos en México, gracias a que profesionalizaron sus procesos de cobro y, en varios casos, incorporaron despachos privados para fortalecer su gestión fiscal.

Estas administraciones entendieron que la recaudación no aumenta por inercia, sino mediante una estructura técnica y moderna. En el caso de Tijuana y Culiacán, por ejemplo, la recaudación creció más de 100% y 26% respectivamente tras implementar esquemas de colaboración con despachos externos. Ensenada y La Paz, que adoptaron el modelo en 2020, alcanzaron niveles históricos de ingresos en 2021, superando los 370 millones de pesos anuales por impuestos municipales.

Despachos privados: aliados de la eficiencia

El esquema de tercerización de la cobranza permite a los municipios contar con personal capacitado, sistemas informáticos avanzados y estrategias efectivas de notificación y recuperación de cartera vencida. Los contratos suelen incluir una comisión por éxito de entre 20% y 30% sobre lo recaudado, además de una cuota fija accesible, lo que los convierte en una alternativa rentable frente a los costos de operar estructuras internas poco eficientes.

De acuerdo con Antonio Mejía, socio de la consultora Azmen Soluciones, “los municipios medianos son los más interesados en este tipo de servicios, ya que suelen carecer de capacidad técnica, pero tienen un alto potencial económico”.

Por su parte, José Carlos Rodríguez Pueblita, socio de Pondera Consultores, considera que “la contratación de despachos especializados es positiva por las limitadas capacidades de fiscalización que enfrentan los municipios. Además, el esquema es transparente, porque el despacho gana solo si logra resultados”.

Liquidez y autonomía financiera: los grandes beneficios

La experiencia demuestra que los municipios que modernizan su cobranza fortalecen su flujo de efectivo y reducen su dependencia de los recursos federales. Los ingresos adicionales se traducen en mayor liquidez para cubrir gasto operativo, invertir en infraestructura y ofrecer mejores servicios a la ciudadanía.

Además, al contar con una recaudación más sólida, los ayuntamientos mejoran su calificación crediticia y su capacidad de planeación a largo plazo.

Una inversión que genera resultados

El uso de despachos de cobranza especializados no representa un gasto, sino una inversión que multiplica los ingresos municipales y permite un uso más eficiente de los recursos públicos.

En un entorno económico donde los municipios deben ser más autosuficientes, la colaboración con el sector privado se ha consolidado como una solución eficaz, segura y comprobada.

Los casos de Tijuana, Culiacán, Ensenada y La Paz son prueba de que la innovación administrativa y la profesionalización de la cobranza sí funcionan. Apostar por esquemas modernos y transparentes permite a los gobiernos locales recuperar liquidez, impulsar el desarrollo regional y mejorar la calidad de vida de sus habitantes.

En un momento en que los gobiernos locales enfrentan mayores exigencias ciudadanas y menos recursos federales, apostar por la profesionalización y la colaboración con despachos especializados en cobranza no es opcional, sino estratégico. Los resultados ya demuestran que esta fórmula mejora la liquidez, eleva la eficiencia administrativa y fortalece la autonomía financiera municipal. Es tiempo de que más ayuntamientos adopten modelos modernos de gestión tributaria y conviertan la recaudación en una verdadera palanca de desarrollo local.