Primer año de Sheinbaum: estrategia contra el crimen y negociación con EE.UU.
- Redacción
- 29 sept
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Claudia Sheinbaum cumple su primer año como presidenta de México, con la seguridad como eje central de su gestión. Desde 2008, el país atraviesa una crisis de violencia marcada por la expansión de cárteles, mafias regionales y bandas locales, organizaciones que no solo diversificaron sus negocios ilícitos, sino que también comenzaron a incidir en procesos electorales mediante presión, agresiones o apoyo a candidaturas afines.
Uno de los principales argumentos que la catapultaron a la presidencia fue su desempeño como jefa de Gobierno en la Ciudad de México. Ahí logró reducir los homicidios a la mitad en cuatro años y mejorar la percepción ciudadana gracias a una estrategia que combinó inteligencia, investigación criminal y coordinación estrecha con la fiscalía.
Crisis en Culiacán y riesgo nacional
Al asumir la presidencia, Sheinbaum enfrentó una crisis de violencia en Culiacán, Sinaloa, detonada por la fractura del Cártel de Sinaloa en dos facciones rivales encabezadas por las familias Guzmán y Zambada. El riesgo de que el conflicto se extendiera a nivel nacional llevó a la mandataria a atenderlo como prioridad, lo que permitió contenerlo territorialmente durante su primer año de gestión.
La presión de Trump
A los pocos días de su toma de posesión, Sheinbaum tuvo que lidiar con la reelección de Donald Trump en Estados Unidos. El republicano lanzó amenazas arancelarias, exigió acciones más duras contra la migración irregular y el trasiego de drogas, y presionó tras la designación de seis cárteles mexicanos como organizaciones terroristas.
Frente a ello, Sheinbaum respondió con firmeza: México “colaboraría y cooperaría, pero que no se subordinaría”. Calificó como “inaceptable” el rumor de una posible incursión militar estadounidense en territorio nacional.
En un gesto de cooperación, envió 10 mil soldados a la frontera y extraditó a 55 capos de alto perfil en dos entregas (29 en febrero y 26 en agosto). Esto permitió a Washington acceder a información clave, mientras México alivió la presión sobre su sistema penitenciario.
Estrategia y resultados
A pesar de la tensión, Sheinbaum logró evitar un incremento de aranceles hacia México, en parte gracias a su manejo pragmático y al trabajo del gabinete de seguridad, encabezado por Omar García Harfuch.
Su administración presentó la Estrategia Nacional de Seguridad Pública, sustentada en cuatro ejes: atender las causas de la violencia, consolidar la Guardia Nacional, fortalecer la inteligencia y la investigación, y asegurar coordinación absoluta entre niveles de gobierno. Con el respaldo legislativo de su partido, pudo consolidar varias de estas medidas.
Balance del primer año
El Gobierno federal ha logrado contener la violencia en Culiacán y evitar choques arancelarios con Estados Unidos, al tiempo que cumple con exigencias en materia de seguridad, extradiciones y decomisos. No obstante, persisten retos clave: cooperación más amplia con Washington en temas como tráfico de armas y huachicol, y la atención a problemas domésticos como la extorsión y las desapariciones.






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